Como una forma de presentarse ante sus nuevos compañeros de equipo, el dominicano Sammy Sosa bateó unas 24 pelotas por encima de la barda del jardín central durante su primer entrenamiento con los Orioles de Baltimore.
Antes de que hubiera terminado, cerca de la mitad del equipo interrumpió sus entrenamientos para ver el espectáculo de cuadrangulares.
``Sammy, nos vamos a quedar sin pelotas!'', bromeó el jardinero Larry Bigbie, quien observó con asombro cómo una pelota tras de otra volaban por el campo para superar la barda del campo de prácticas.
``Van a tener que meter los aviones a los hangares a partir de ahora'', agregó Bigbie.
Los Cachorros de Chicago se mostraron aliviados de deshacerse de Sosa después de la turbulenta temporada del 2004, y los Orioles se muestran muy complacidos de contar con él.
``Estoy en un nuevo hogar con un equipo joven al que puedo ayudar. Estoy muy contento de estar aquí, sin duda, y puedo ver en sus rostros que ellos también están contentos con que yo esté aquí'', indicó Sosa.
Sosa llegó a los Orioles a principios de este mes en un cambio que vio la partida de Jerry Hairston hijo y dos jugadores prospectos a Chicago.
Sosa era uno de los peloteros más populares de Chicago, pero su estancia de 13 años con la ciudad y los Cachorros se agrió después de una serie de problemas, como cuando fue descubierto usando un bate relleno de corcho y un enfrentamiento con el piloto Dusty Baker, que lo llevó a marcharse del último partido de la temporada del 2004 antes de terminara.