Para que se lo aprendan, les señalo que SECONSI son las siglas del Club Sexo, Condón y Sida, club éste fundado especialmente por las personas que, como usted, no le paran bola al desenfreno sexual, creyendo que los carnavales son para dar rienda suelta a todas las bajas pasiones que, como fantasías, han estado incubando, cuando lo que realmente incubaban, y siguen incubando, es el VIH/SIDA, enfermedad ésta que llegó, se plantó y está entre nosotros con todo y el uso del bendito condón.
De hecho, tanto el Ministerio de Salud como el Ministerio de Educación (y últimamente hasta la Iglesia), están promoviendo el uso del condón que, más que una licencia para fornicar, dicho accesorio, al nivel sociocultural que se le ha colocado, se ha convertido en herramienta de amoralidad que no sólo mal utiliza la gente que practica el amor libre, sino también aquellos que son los "tira-la-piedra y esconde-la mano", o sea esos que de día ladran y de noche maúllan.
Del mismo modo, el Día de los Enamorados, hoy disfrazado de Día de la Amistad, es otro refugio para que ciertos sectores de nuestra sociedad sacien sus ardores sexuales, poniendo por delante aquella exigencia que hace demandar una "prueba de amor", que elevado al cubo (el o la insaciable para la época hacen varias exigencias a diferentes personas), y sólo es cuestión de tiempo para que las salas de los diferentes hospitales reclamen sus cuerpos, y más tarde, con el transcurrir del tiempo, también los reclamen las morgues.
Así las cosas, exhorto a los fanáticos del Dios Momo, lo mismo que a los seguidores de Cupido, que sean prudentes en sus encuentros cercanos con el "tipo opuesto", y aún del "mismo tipo", sabiendo que cualquier exceso irremediablemente conduce a vuestra autodestrucción.
Y tampoco olviden que el acto de hacerse colocar cenizas en la frente no significa que ya han sido "lavados sus pecados"..Esto es tan solo un rito de nuestra fe, habida cuenta que si no modificamos nuestra conducta, sólo será un repetir cada año el mismo ritual, aunque nos encaminemos hacia lo ocurrido en Sodoma y Gomorra. ¡Au Revoir!