Aquel viejo fanático llevaba su radio pegado a la oreja izquierda. Un refresco en la mano derecha y una gorrita algo desteñida que apenas alcanzaba a delirar en sus letras.. Metro o Metros.
Caminaba como extraño.. algo así como oxidado por los días que no había tenido, para disfrutar al béisbol. Parecía inquieto. El tiempo le había negado un juego en la temporada 2006, pero el ambiente empezaba a calentarse.
Lo del miércoles en la noche fue como un refresco en el desierto o como una pizza entre obreros calcinados por el hambre. Por lo menos tuvimos una parte de la fiesta juvenil y ya viene el mayor. ¡Alegres corazones!
TORNEO JUVENIL OK
La afición respaldó en gran forma los dos partidos realizados en la final.