"Ya esto no es ni la sombra de lo que era antes", exclamaba afligida una residente de Altos de las Acacias, en el corregimiento de Juan Díaz.
Y es que no es para menos, pues la que era una de las barriadas modelo de la vía Tocumen hace algunos años está siendo absorbida por la vorágine de violencia de la que no escapan otros sitios del país.
La barriada ha sido escenario de riñas, balaceras y hasta homicidios.
El último de estos hechos violentos se registró en horas de la mañana de ayer sábado en la vía principal de la urbanización, cuando un joven de 22 años fue asesinado a sangre fría.
Jefrey William Terrado, nacido en Estados Unidos, pero con nacionalidad panameña, fue ultimado de tres disparos, uno en el pómulo izquierdo, uno en la frente y otro en la espalda.
El cuerpo inerte de Jefrey quedó tendido en las afueras de la residencia 1621, donde dormían tres niños, cuyo padre había salido minutos antes a comprar el desayuno.
Aunque uno de los disparos penetró en la casa, no causó ningún daño a la propiedad o sus ocupantes.
El hoy occiso había salido desde las 11:00 de la noche del viernes desde un cuarto que alquilaba con su concubina en la Calle 13 para encontrase con unos amigos.
Los familiares dijeron desconocer hacia qué sitio exacto se dirigía.
HIPOTESIS
Una de las hipótesis que se maneja en este asesinato es que uno de los sujetos que acompañaban al occiso entabló una discusión con él, lo que provocó una riña que terminó con el desenlace fatal.
Un vecino que residía unas cuadras más abajo del lugar del crimen dijo haber escuchado a sujetos que discutían.
Otra de las hipótesis sustenta que Jefrey mantenía diferencias con un sujeto de San Miguelito, que anteriormente lo había amenazado.
La víctima tenía poco tiempo de haber venido de Estados Unidos.
