El panameño Mario Augusto Tuñón, de 50 años, fue extraditado desde Miami a Panamá, por tráfico de cocaína.
Se le vincula con el decomiso en febrero de 2002 de 1, 480 paquetes de cocaína incautados en dos camiones y a otros 77 bultos de esa misma droga, escondidos en una empacadora de plátanos en Chiriquí.