Cuatro muertos en un mes y más de 50 transportistas y usuarios asaltados en el mismo periodo fue la gota que derramó el vaso de la paciencia de los conductores colectivos y selectivos del área Este de la ciudad capital.
Los transportistas decidieron decir "¡Hasta aquí!", y ayer, miércoles, durante 90 minutos tuvieron cerrados los cuatro paños de la carretera Panamericana para exigirle al gobierno mayor seguridad.
En esa protesta, los conductores de buses y taxis no estaban solos; contaron con el apoyo de un inusual aliado: los usuarios del área que decidieron sumarse a la medida de presión al considerarse ellos también víctimas de los delincuentes.
La manifestación era encabezada por miembros de la Cooperativa San Cristóbal, que agrupa a 37 rutas que cerraron dos puntos neurálgicos de la vía: frente al Centro Comercial La Doña, y la entrada de Chepo.
Al grito de "¡Justicia!", los molestos conductores recordaban a los compañeros caídos, a los que consideran mártires del sector, en la titánica lucha por enfrentar a la delincuencia.
Los manifestantes bloquearon con buses y taxis los paños de la carretera mientras eran observados de cerca por unidades del control de multitudes de la Policía Nacional quienes tenían órdenes de reabrir la misma.
Al final, el enfrentamiento con los antimotines no se deió tras llegar a un acuerdo con los protestantes de limitar el cierre por un tiempo específico.
Dirigentes de la Cooperativa San Cristóbal no descartan nuevas acciones de protesta si no reciben pronto respuestas de las autoridades, pues programas paliativos como Transportistas Vigilantes no han dado el resultado que ellos esperaban.
UN MES, VARIAS VICTIMAS
En lo que va del 2008, dos taxistas y un conductor de bus han muerto en manos de delincuentes. Las 3 víctimas estaban ligados a centrales de transportes del área Este de la ciudad capital.