La plaza 28 de noviembre, el sitio donde en la actualidad se encuentra la biblioteca pública de La Chorrera y el sector conocido como El Bajadero son algunos de los lugares en los que se tocaron los primeros bailes de cumbia chorrerana.
EL GUSANILLO DE LA MUSICA
Don Julio Isaacs, padre del Ñato Califa, fue quien lo introdujo en los sonidos folklóricos, aunque la veta musical le venía en la sangre. En vez de pedir juguetes en Navidad, el primer regalo que pidió el pequeño Carlos fue una armónica.