Los Eagles de Filadelfia, apoyados en ataque efectivo que encabezó el mariscal de campo Donovan McNabb, consiguieron clasificarse por cuarta vez consecutiva para la final de la Conferencia Nacional de la liga de fútbol americano profesional, al imponerse por 27-14 a los Vikings de Minnesota.
Ni la ausencia por lesión del recibidor estrella Terrell Owens, ni las últimas dos derrotas de la temporada regular, y ni tan siquiera la inactividad de McNabb, que no había jugado un partido oficial en tres semanas, fueron un factor negativo para unos Eagles, que nuevamente demostraron una gran versatilidad en su juego ofensivo.
La primera parte fue aprovechada rápidamente por el equipo de Filadelfia, que liderados por McNabb se hicieron presentes por primera vez en el marcador, al terminar exitosamente una avanzada ofensiva con un pase de dos yardas que recibió Freddie Mitchell.
Con sólo 44 segundos transcurridos del segundo cuarto, McNabb volvió a ser el jugador clave en la ofensiva de Filadelfia, al conectar un envío de siete yardas con el corredor ofensivo Brian Westbrook, que puso la pizarra 14-0 a favor de los Eagles para ese momento.
McNabb, que completó 21 de 33 pases y recorrió 286 yardas por aire y cinco por tierra.
Los Vikings, que venían con los ánimos renovados luego de derrotar a los Packers de Green Bay en la pasada semana y después de pasar el primer cuarto desapercibidos en el ataque, lograron reducir diferencias gracias al mariscal de campo Daunte Culpepper, que recorrió siete yardas y acerco a su equipo 14-7 en el marcador.
Sin embargo, la posible reacción del equipo de Minnesota fue rápidamente aplacada por los Eagles, cuando en la siguiente avanzada ofensiva, Mitchell recuperó con suerte un balón lanzado irregularmente por McNabb, para volver a abrir diferencias.
A partir de ese momento, la ofensiva de los Eagles se tomó un respiro y dejó al equipo defensivo con la responsabilidad de mantener la diferencia, algo que lograron hasta permitir una nueva anotación de los Vikings en las postrimerías del último cuarto.
PATRIOTS 20, COLTS 3
El corredor Corey Dillon apoyo eficientemente a su mariscal de campo Tom Brady, y los Patriots de New England contaron con una poderosa defensa capaz de frenar al enrachado "quarterback" Peyton Manning, y los Patriots de New England vencieron 20-3 a los Colts de Indianápolis.
La victoria llevó a los Patriots a colocarse a sólo un juego de participar en su tercer Super Bowl en cuatro temporadas.
Dillon y la ofensiva de los Patriots ganaron más de 200 yardas por tierra y apagaron la racha triunfadora de Manning.
El triunfo da derecho a New England de viajar a Pittsburgh a enfrentar a los Steelers por el título de la Conferencia Americana, el próximo fin de semana.
Tedy Bruschi, Willie McGinest y la táctica defensiva del entrenador de los Patriots, Bill Belichick, frenaron a Manning, quien completó 19 de 29 pases para 163 yardas sin anotación.
Manning sigue con marca perdedora de 0-7 en Foxboro, en donde perdió su segundo juego consecutivo de postemporada.
La gélida temperatura fue uno de los factores que jugó un papel importante en el resultado. El clima frío fue también una de las estrategias de los Patriots, acostumbrados a jugar en campos nevados.
La estrategia de Bellichick fue correr el balón, enviar pases cortos y jugar con el cronómetro para congelar aún más las acciones de los Colts.
Corey Dillon corrió para 144 yardas en su primer juego de "playoff" en ocho temporadas.