Los presidentes de El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua decidieron estrechar el cerco a los miembros de las violentas pandillas juveniles conocidas como "maras", mediante la firma de un convenio que permitirá capturarlos en cualquiera de los países sin importar su nacionalidad.
El acuerdo, firmado en Guatemala, busca contrarrestar la actividad de esos grupos que "tienen fuerte poder internacional. De hecho sus cabecillas tienen estructuras en Estados Unidos, el resto de Centroamérica, con el narcotráfico y están integrados antes que nosotros", explicó el presidente salvadoreño Francisco Flores en rueda de prensa. |