Las dos colombianas liberadas el jueves por las FARC tras seis años de secuestro seguían ayer en Venezuela, donde la oposición al presidente Hugo Chávez le critica que pidiera reconocimiento a esa guerrilla como fuerza irregular no terrorista.
Sobre esa petición a favor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la liberada ex parlamentaria Consuelo González, quien anunció que hoy domingo volverá a su país, sostuvo que no la conoce a fondo, pero que "cualquier acción que permita avanzar en la búsqueda de la paz y el entendimiento humanitario es válida".
Clara Rojas, la liberada ex compañera de la fórmula presidencial de Íngrid Betancourt, quien sigue secuestrada, dijo que aún no define la fecha de regreso a Bogotá, y sobre las FARC, apuntó que "en principio parecería ser una organización delictiva" que "mantiene a personas secuestradas", lo que reviste "delito de lesa humanidad".
Ambas ofrecieron la noche del viernes su primera rueda de prensa, por separado, en las cuales clamaron por la liberación de los demás secuestrados.
"Ellos (los guerrilleros de las FARC) se dicen que son (parte de un) ejército del pueblo", pero "entrenan gente para secuestrar", recriminó Rojas, quien llamó al secuestro "violación total a la dignidad humana".
En esa condición tuvo por cesárea a su hijo Emmanuel en 2004, del cual fue separada poco después y quien ahora se encuentra en un albergue del estatal Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, en Bogotá, del que espera sacarlo próximamente.
Sobre el guerrillero padre del menor, dijo que pudo haber muerto, pero que en realidad no tiene información precisa y "ni siquiera si sabe que es el papá del niño".
REVUELO EN COLOMBIA: 700 REHENES
Las declaraciones del mandatario venezolano causaron revuelo en Colombia, donde las FARC, con unos 17.000 integrantes, luchan contra el Estado, y son consideradas la mayor fuerza secuestradora, con al menos 700 rehenes en su poder, y una organización dedicada al narcotráfico, de acuerdo con fuentes oficiales.