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CUARTILLAS
Alcahuetas
 
Milciades A. Ortiz Jr.
Colaborador
La dama es una fan�tica de las telenovelas. Y como all� aparecen muchas cosas de la vida real, esto le ha causado cierta preocupaci�n. Por eso me pregunt� con seriedad hace poco: "�Ud. cree que una madre debe respaldar siempre a sus hijos, aunque estos est�n locos o hagan malas acciones?". Se refer�a a una conocida telenovela, donde una madre apoya totalmente a su hija, quien sufre de serios trastornos mentales. La madre llega incluso a negar tratamiento m�dico a su hija, para "defenderla de quienes desean hacerle da�o". Yo le dije que no; que los padres no deben ser alcahuetes de sus hijos, aunque estos sean "sangre de su propia sangre". A�ad� que los hijos deben recibir siempre una orientaci�n seria y madura de sus padres. Por eso, ellos no pueden tapar, ni ocultar, las cosas malas de sus hijos, por m�s amor que les tengan. Pero en la vida real existen muchos casos de padres (casi siempre madres), que "tapan" las fallas y sinverg�encer�as de sus hijos. Se escudan en que una madre no puede dejar desamparado a su hijo, y que los padres tienen el derecho de protegerlos siempre. La primera vez que conoc� uno de estos dram�ticos casos, fue cuando a los dieciocho a�os comenc� a trabajar en un Juzgado Penal. Una madre muy humilde, entre sollozos me dijo que su hijo era inocente; que era v�ctima de discriminaci�n por ser negro, que la polic�a "la ten�a con �l". Por eso lo arrestaban siendo inocente. Mi personalidad de joven que defiende la justicia y la verdad, sufri� al conocer estas palabras. Y busqu� el expediente del "inocente", v�ctima de una "sociedad injusta y discriminadora". Pues bien: el "angelito" ten�a nada menos que tres p�ginas y media de historial policivo. Hab�a cometido toda clase de delitos, menos el asesinato. En Coiba estuvo varios a�os... pero su madre insist�a que nunca lo hab�an detenido. Otra madre alcahueta era la de "Perlita", un ni�o que se met�a en los negocios y casas por el Instituto Nacional, hace a�os atr�s. En una ocasi�n se llev� valiosos anillos de una empresaria, quien supo d�nde viv�a el delincuente. Por supuesto que la madre defendi� a "Perlita" con u�as y garras. Todo lo que dec�an de �l era mentira, Y aunque la dama recuper� uno de sus anillos en la misma casa del ni�o, la madre no acept� que era ladr�n. Ella misma ayudaba al chiquillo a vender lo robado. As� el ni�o contribu�a a mantener a su madre, quien seguramente estaba orgullosa de �l. (Si no me equivoco, a�os m�s tarde, ya de adulto, "Perlita" muri� al resistirse a la polic�a. Espero que la madre haya comprendido su error, aunque fuera tarde). Se alcahuetea a los hijos de muchas maneras, tal vez no tan dram�ticas como las que he mencionado. Conozco madres y padres que se niegan a aceptar que su hijo es un fracasado, porque no estudia y se la pasa en fiestas. Entonces les echan la culpa a los educadores, a la escuela, a todo el mundo, menos al verdadero responsable. "Pobrecito hijo, �l no tiene la culpa que haya malos maestros", dir� la madre sin lugar a dudas. Tambi�n le tapan otras sinverg�encer�as de sus hijos. Por ejemplo, el de aquella madre que recib�a en su casa y atend�a a las queridas del hijo. Y sin ning�n sonrojo, hac�a lo mismo con la esposa del muchacho. Ella se justificaba porque deb�a apoyar a su hijo en lo que hiciera, "porque para eso est�n las madres". Creo que los padres deben educar y orientar a sus hijos dici�ndoles la verdad. Hay que inculcarles valores c�vicos y morales. Y sobre todo, el hijo debe aprender desde peque�o, que debe hacerse responsable por lo que haga en la vida, sea bueno o malo. Hacer lo contrario, a la larga puede producir resultados lamentables.
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