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Argentina seguir�a dando asilo a ex golpista paraguayo Oviedo
Buenos Aires
Agencias Internacionales
El gobierno argentino podr�a seguir dando asilo al ex golpista paraguayo Lino Oviedo a pesar de nuevas y controvertidas declaraciones a la prensa local, dijo ayer un alto funcionario. "De las hip�tesis posibles la veo como la menos probable", dijo a periodistas el secretario de Seguridad Interior, Miguel Toma, consultado sobre la posible expulsi�n de Oviedo. La canciller�a evaluaba ayer si el ex general hab�a violado las reglas del asilo luego de que, en una entrevista con un diario local, prometi� por segunda vez en 15 d�as que volver� a Paraguay para intentar ser presidente. "La canciller�a dar� a conocer un criterio al respecto... si hay elementos suficientes se van a adoptar los criterios que se deban adoptar", dijo Toma, consultado acerca de si el gobierno anunciar�a su decisi�n el lunes por la tarde. El ex general golpista, de 56 a�os, se asil� en Argentina tras el asesinato del vicepresidente paraguayo Luis Mar�a Arga�a, acribillado en marzo en una calle de Asunci�n, y de siete manifestantes opositores. Paraguay reclam� en reiteradas ocasiones la extradici�n de Oviedo, a quien acusa de ser el instigador de esos cr�menes. Pero Argentina rechaz� dos veces el pedido alegando que el retorno de Oviedo desestabilizar�a la democracia de Paraguay. Oviedo arrib� el jueves a la patag�nica provincia de Tierra del Fuego adonde fue confinado por violar la prohibici�n de realizar actividades o manifestaciones pol�ticas que impone el asilo. Antes de su traslado el ex general resid�a en una c�moda casa de campo en las afueras de Buenos Aires. Ahora pasa sus d�as en una solitaria estancia azotada por los fuertes vientos del sur. El crimen de Arga�a fue el punto culminante de una crisis pol�tica que llev� a la renuncia del entonces presidente Ra�l Cubas, actualmente asilado en Brasil. Oviedo abandon� Paraguay y se instal� en Argentina, donde recibi� el beneficio del asilo. La situaci�n de Oviedo gener� roces diplom�ticos entre Paraguay y Argentina, socios comerciales en la uni�n aduanera Mercosur junto a Brasil y Uruguay. Toma reiter� el malestar del gobierno argentino por las declaraciones de algunos legisladores paraguayos que se�alaron al presidente Carlos Menem como amigo personal y socio comercial del ex general, y volvi� a exigir la disculpas de Paraguay. La canciller�a expres� ayer oficialmente al Paraguay el ``disgusto'' del gobierno argentino por declaraciones de funcionarios y legisladores del vecino pa�s, consideradas ``agraviantes'' para Menem, en relaci�n con la situaci�n de Oviedo. La comunicaci�n fue transmitida esta ma�ana por funcionarios del ministerio de relaciones exteriores al encargado de negocios del Paraguay, V�ctor Hugo Pe�a Bareiro, a cargo de esa representaci�n, seg�n un informe oficial de la canciller�a. La embajadora paraguaya Leila Rachid fue llamada en consulta por su gobierno, como expresi�n del desagrado de ese pa�s por haber rechazado el presidente Menem el pedido de extradici�n de Oviedo, sin dar intervenci�n a la justicia argentina. A ra�z de ese rechazo hubo una �spera reacci�n de parte de dirigentes paraguayos y uno de ellos, el ministro de defensa Nelson Arga�a, calific� de ``sinverg�enza'' a Menem, amigo personal de Oviedo. El asilado ex general paraguayo almorz� en la v�spera con oficiales de la Gendarmer�a Nacional, en la ciudad de R�o Grande, al norte de esta provincia de Tierra del Fuego, inform� ayer el diario local Tiempo Fueguino. El diario sostiene que Oviedo abandon� la estancia Rivadavia, donde el gobierno argentino le fij� residencia, y se traslad� en autom�vil hasta el casino de oficiales del destacamento de la Gendarmer�a (polic�a de fronteras) en pleno centro de R�o Grande. All� Oviedo almorz� acompa�ado por el jefe del escuadr�n de Gendarmer�a de Ushuaia, Conrado V�zquez y otros oficiales de esa fuerza de seguridad. Tambi�n estaban presentes su abogado argentino, Federico Pinto Kramer y el comerciante paraguayo Eligio Lovera, radicado en Tierra del Fuego. La salida de Oviedo del lugar de su residencia se realiz� a pesar del pedido que le habr�a formulado el presidente Carlos Menem de que permaneciera en la estancia, a ra�z del revuelo ocasionado por declaraciones pol�ticas del militar, que originaron un deterioro de las relaciones con Paraguay.
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