S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


inicio

al cierre

nacional

opinión

el pueblo habla

relatos y reportajes

comunidad

la voz del interior

sport

el mundo

viva

en la cocina

sucesos

especiales

 

CRITICA
 

  OPINI�N


�Queremos la Paz!

Rómulo Emiliana | Monseñor

La paz es un camino de desprendimiento de nuestro ego altanero y soberbio que agrede con palabras, indiferencias, intrigas, hipocresías y traiciones. La paz es fruto del control de mis emociones más dañinas y el proceso de sublimación de energías ocultas, que nacen de lo primitivo mío y que buscan como un volcán hacer erupción. La paz es la reconciliación de mis fuerzas positivas y negativas, fundidas en el fuego de los altos hornos de mi pasión por un mundo mejor. Es el reencuentro consciente de mi espíritu que busca crecer con todo lo que tiene mi mente, mis sentimientos, emociones e instintos, moldeado todo en un proceso que nunca acaba en el que me hago más conciencia, más espíritu, más divino sin dejar de ser humano. La paz es entonces conectar con el Verbo hecho carne, modelo perfecto de unión, en ese caso en un solo yo divino con dos naturalezas, y desde ahí intentar en todo momento hacer que mi espíritu y materia se entiendan y se hagan uno.

La paz no es un estado quieto, sin lucha y sin novedad, sino la fuerza interna del amor buscando verterse como un río caudaloso en el mar de la humanidad, para hacerse parte de un todo, en el que Dios sostiene lo creado siendo su fuente y vida. Por lo tanto, es movimiento, camino, intentos fallidos, rutas que reemprender, obstáculos que superar, acciones que no siempre terminan bien, un seguir y seguir, buscando hacer sentir en la historia mi presencia positiva, dejando una huella, necesaria para que el mundo siga su proceso ascendente. Así pues, la paz es lucha, combate, inquietud y hasta angustia, de hacerme más persona, más creativo, más fuerte y humano, haciendo de mi vida una luz y esperanza, un peldaño para que otros suban, un puente para que otros crucen, un pedazo de pan para que otros se alimenten.

La paz es fruto de la justicia, de darle a cada uno lo que se merece, pero más aún de la misericordia, porque si el Señor sólo fuera justo con nosotros, hace tiempo nos hubiera borrado del planeta. Y recuerde que con Dios podremos vencer el rencor y el odio, enemigos de la paz, porque con �l somos invencibles. Amén.




OTROS TITULARES

Onceno de la Guardia Nacional

Sin embargo, me tomo a pecho el mundial

�Habrá ticos contra Martinelli?

Comentarios

Los Mismos de Siempre

�Queremos la Paz!

El valor de la unidad familiar

Día del Padre

 


 

  





linea
linea gris
 

   copyright © 1995-2009, CRITICA EN LINEA
todos los derechos reservados