El Gobierno de Kosovo consideró ayer que la misión interina de la ONU (UNMIK), que desde 1999 administra el territorio balcánico, ha cumplido con su cometido, por lo que se debería poner fin "lo antes posible" a su presencia en la antigua provincia serbia.
"Pedimos que se ponga fin al despliegue y el mandato de UNMIK", solicitó ayer el ministro de Exteriores de Kosovo, Skender Hyseni, en una reunión del Consejo de Seguridad, ya que Pristina estima que la salida de esa misión, un año después de su declaración unilateral de independencia, es un paso más hacia la construcción del nuevo Estado balcánico.