Muerte... al parecer, esta palabra se ha convertido en algo tan habitual en nuestros días que decirla está muy lejos de causarnos recelo o escalofríos, a pesar de la magnitud de la misma. Estamos tan acostumbrados al término, que ni el rostro de quienes han sido tocados por ella, nos afecta... hemos creado una especie de inmunidad.
�Pero de dónde viene esta falta de "humanidad" que hemos desarrollado? �De los medios de comunicación? En mi opinión personal, sí.
Muerto tras muerto, somos bombardeados por escenas de violencia desmedida, que nos han llevado a considerar dichos terribles acontecimientos como "cotidianos".
Y ya no sólo se han conformado con hechos reales, ahora nos ofrecen toda una amplia gama de programas en los que nos venden asesinos, prostitutas y ladrones, como lo más "cool" del momento; lavando de cierta forma la mente de niños sin personalidad, que imitan todo lo que ven en la televisión.
Tenemos periódicos que nos muestran jóvenes antisociales, posando cual portada de revista, que guardan como trofeo, porque han encontrado una forma de darse a conocer, en este país, donde la muerte... ha dejado de importar.
Y qué decir de las radios, en las que a cada 5 minutos envían saludos o reciben llamadas, de distintos centros penitenciarios, lo cual considero una total burla a la ciudadanía que intenta confiar en las leyes.
Político tras político, todos no han hecho absolutamente nada para detener quizás al principal responsable de la mortandad en nuestro país. Es como si hubieran hecho un pacto secreto con la criminalidad... en el que si ninguno de los 2 bandos se tocan.
Y sobre el pueblo, �qué mayor culpable que aquel que es adicto al maltrato?
La culpa no puede seguir rebotando de mano en mano, no podemos seguir acusándonos unos a otros por este "infierno"... y lamentablemente el infierno está apenas calentándose porque para cuando las calderas empiecen a hervir, tal vez sea demasiado tarde, y no quede nadie a quien culpar.