El ex mandatario Ernesto Pérez Balladares decidió anoche hacer frente al proceso por blanqueo de capitales que adelanta el fiscal Especial Contra la Delincuencia Organizada, José Ayú Prado, y evitó así la conducción por parte de agentes de la Policía y de la DIJ que estaban tras sus pasos.
Pérez Balladares se aproximó a eso de las 8:25 p.m. al edificio Avesa, donde opera la Fiscalía. "El Toro" llegó a bordo de un vehículo BMW con placa 463258. El ex presidente lucía camisa blanca, saco oscuro y corbata roja con diseños; su rostro era serio y a su entrada prefirió evitar a los periodistas.
Una hora antes, su "team" de abogados llegó a la Fiscalía Anticrimen para esperar al cliente.
El fiscal José Ayú Prado había ordenado la conducción e indagatoria de otras personas que tenían derecho a firmar en cuentas bancarias de sociedades anónimas que recibieron fondos de la empresa Lucky Games, compañía a la que el gobierno de Pérez Balladares le otorgó una concesión para la explotación de 500 máquinas tragamonedas.
Todos los conducidos anteriormente al despacho de Ayú Prado prefirieron no responder y se acogieron al artículo 25 de la Constitución Nacional. La Fiscalía fijó nueva fecha para ampliar la indagatoria.
La presencia de "El Toro" en Avesa fue de apenas 40 minutos, pero no se acogió al artículo 25 de la Carta Magna. En la diligencia otorgó poder a la abogada Guillermina McDonald, se le leyeron los cargos y Pérez Balladares alegó que esperaría que se resuelvan diversos recursos e incidentes presentados. La Fiscalía le levantó la orden de conducción, pero el 15 de enero deberá comparecer nuevamente al despacho de Ayú Prado.
Pérez Balladares alegó que nunca estuvo escondido y que todo el tiempo permaneció en su casa en la avenida República de la India No.18. Nadie me fue a buscar, añadió.
Sin embargo, consideró exagerado e innecesario que se ordenara su conducción, pero dijo que acudirá cuantas veces sea necesario al Ministerio Público, porque quien no ha cometido delito, no tiene por qué ocultarse de nada.
En tanto, una fuente forense explicó que la regla general en la Fiscalía Especializada Contra la Delincuencia Organizada es conducir a los indagados, pero al final no todos son detenidos preventivamente.
Además ya existe un pronunciamiento de la Corte Suprema de Justicia, donde se declara que no es inconstitucional la conducción para una indagatoria. Por coincidencia, las partes en este caso eran el hoy fiscal Anticrimen, José Ayú Prado, y Carlos Carrillo Gomila, quien forma parte del equipo defensor del ex mandatario Ernesto Pérez Balladares.
Al proceso por blanqueo de capitales por el que es investigado Pérez Balladares, se agregaron el 23 de diciembre tres tomos con copias de documentos procedentes de dos bancos sobre cuentas bancarias bajo investigación de las empresas Shelf Holding Inc, PTY Advertures y otra denominada Mr. Bull.
Por su parte, el fiscal Ayú Prado presentó un escrito de oposición al hábeas corpus preventivo que estudia la Corte Suprema de Justicia bajo la ponencia del magistrado Alberto Cigarruista contra la detención del ex Presidente, fundamentado en que no se ha ordenado la detención preventiva, ni verbalmente ni por escrito.
Ayú Prado remitió el expediente a la Corte Suprema de Justicia con 17 tomos y aproximadamente 9 mil fojas.