Las víctimas del secuestro y los abusos sexuales de Josef Fritzl, conocido como el "monstruo de Amstetten", han salido de la clínica en la que estaban internados desde que su caso conmocionara al mundo el pasado abril.
El abogado de la familia, Christoph Herbst, difundió hoy esta información, aunque se negó a dar cualquier otro dato más sobre el paradero de Elisabeth y de sus seis hijos, de entre 5 y 19 años, nacidos de las violaciones a las que la sometió su padre durante 24 años de encierro.
Herbst informó que la familia ahora estaba viviendo por su cuenta y la radio pública ORF agregó que el domicilio se mantendrá en secreto para favorecer que la familia pueda empezar una nueva vida.