La administración de Martín Torrijos es magnífica vendedora. La noticia abajo desplegada de El Panamá América, es el resultado de una Ley que lo único que produce es beneficios jugosos al país y a su gente, pues se trata de recursos inútiles (islas y costas) que es mejor venderlos a los mejores especuladores nacionales e internacionales.
Gracias Martín Torrijos y a los libertarios de Panamá por arrebatarnos las islas a todos los panameños a través de la Ley 2 del 7 de enero de 2006. Gracias Benjamín Colamarco, Alejandro Ferrer y Ubaldino Real. Gracias Balbina Herrera y Ligia Castro. Gracias Diputados de la República, por arrebatarnos las islas y costas de Panamá y entregárselas a los especuladores y testaferros.
Gracias a la Comisión de Hacienda de la Asamblea Nacional en el año 2005, especialmente al diputado, Pedro Miguel González, por lograr un excelente mercadeo y negocio con nuestras islas en el Archipiélago de Bocas del Toro y el resto de los archipiélagos del país para el desarrollo de residencias de lujos para extranjeros, exonerados de todo impuesto y tributo. Gracias de paso por realizar transacciones a favor del país por ley que permitió la venta de nuestro país. Admiramos vuestra astucia y velocidad de acción. Gracias al Excelentísimo Señor Presidente por solicitarle a nuestros diputados por discutir urgencia notoria la necesidad de vender nuestro patrimonio insular y costero. Gracias a Elías Castillo, Presidente de la Asamblea Nacional y a todos los diputados que apoyaron esta magnífica iniciativa. Gracias por darle más ventajas, prebendas y privilegios a los extranjeros que a los nacionales. Gracias a todos por ignorar y borrar del historial de las discusiones en tercer debate las posiciones ambientalistas inadecuadas para lograr este gran negociado.
Gracias a Rubén Blades por inventar el concepto de exención de impuestos denominado turismo residencial. El país se desborda en riquezas por esta magnífica política de vender nuestro patrimonio y no cobrar impuestos de ningún tipo. .
Gracias por todos los esfuerzo por vender el país al mejor postor. Lo están logrando con creces. Felicidades.
Gracias por ser tan valientes y atreverse como nunca antes en la historia republicana: vender nuestros servidumbres de playas y nuestras islas al mejor postor.
Gracias por convertir a los costeños e isleños y al resto de los panameños en extraños en nuestra propia tierra.