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Jilma Núñez de Rodríguez, madre desconsolada que en medio del dolor clama justicia por la pérdida de su hija menor Marisel Rodríguez Núñez, de 21 años, otra víctima de atropello por un diablo amarillo en esta ocasión de la ruta Vista Alegre-Panamá.
A eso de las 10 de la mañana de ayer, el Juzgado Primero de Circuito de La Chorrera, a cargo de la jueza Alina Oviedo, llevó a cabo la audiencia preliminar en contra del transportista Carlos Gordón Yau, de 36 años, conductor del autobús placa 8B- 864 542766 involucrado en el accidente ocurrido el día 13 de noviembre del 2001 en calle primera de Nuevo Arraiján.
La Fiscalía solicitó la pena máxima para el conductor al considerar que el hecho punible está debidamente acreditado por el supuesto delito de homicidio culposo en detrimento de la joven Marisel Rodríguez.
La defensa y la parte acusadora el tribunal de justicia se acogió al término que establece el código judicial para dar el fallo final o la resolución posteriormente.
"La Familia Rodríguez exige justicia por la pérdida de su ser querido. Reconocemos que el conductor del autobús tiene esposa e hijos. Sé que no me va devolver a mi hija, pero por lo menos sentiríamos consuelo porque fue otra víctima por la negligencia y falta de precaución de un transportista", dijo la madre.
TRISTE ESCENA
Recordó la triste escena de hace un año, cuando le avisaron de la tragedia. Su hija, acompañada de una vecinita de nombre Carmen Cecilia Ardines, ese día -después de cuidar a un bebé de una amiga de la familia que reside en ese sector de Nuevo Arraiján- se montó al autobús de Vista Alegre para salir hacia la Interamericana dirigirse hacia su casa en Llano Largo de la Chorrera. Al bajarse fue alcanzada por el mismo transporte colectivo.
El bus primero impactó a la niña y Marisel trató de halarla, pero también fue atropellada. Murió instantáneamente. La pequeña que la acompañaba sobrevivió pese a sufrir una rajadura en los huesos de la cadera; se le quebraron 5 costillas y fracturas en varias partes del brazo. Ha sido intervenida quirúrgicamente en diversas ocasiones.
"Mi hija era la menor de mis hijos. De cariño le decíamos "la niña". Era graduada del colegio Moisés Castillo Ocaña de La Chorrera de Bachiller en Comercio y había realizado los trámites para ingresar a la universidad. Desafortunadamente la perdimos tan joven, antes de convertir sus sueños en realidad", dijo con palabras entre cortadas de dolor.
La madre pide a las autoridades competentes para que sean más estrictos en aplicar las sanciones correspondientes a esos transportistas que los últimos meses han sido protagonistas de innumerables accidentes, donde pierden la vida personas inocentes.
ACUSACIONES
Según el abogado acusador, Manuel Alejandro Tagles, habían suficientes evidencias para condenar al imputado por negligencia e imprudencia en el manejo, sin embargo, el acusado goza de libertad con una medida cautelar emitida por el Ministerio Público. Cada 15 días debe reportarse al tribunal de justicia. El delito del cual se le acusa tiene una pena mínima de dos a cuatro años de prisión.
TENÍA 25 INFRACCIONES
En la Autoridad de TTT reposa el expediente del conductor y registra 25 casos por infracciones como colisión, licencia vencida, estacionarse en lugar prohibido, conducir con la puerta abierta, desatender señales, de las cuales 12 de esos casos están por resolver.
OTRO CASO
Tagles también representa a la familia Rodríguez por la pérdida de dos anillos que pertenecían a la joven fallecida y en ese caso se encuentran involucrados un funcionario de la Fiscalía Primera del circuito y un ejecutivo de venta de una funeraria del país.
De acuerdo con el abogado, la denuncia fue interpuesta ante la Comisión Anticorrupción, porque al momento de iniciar las investigaciones se percató que existen otros antecedentes similares donde familiares han reclamado pertenencias que se han extraviado de los cadáveres de sus seres queridos fallecidos por alguna circunstancia. |
