Cuando uno es joven, no mide sus palabras. Eso quizás pensó la mayoría de los jubilados y pensionados al escuchar las palabras del vicepresidente Rubén Arosemena de que no habrían aumento en los retiros hasta el año 2010.
Igual pensó el resto de la población panameña cuando analizamos estas palabras. Y el costo de esta declaración soberbia fue la muerte de la señora Beatriz Poveda, que se desfalleció en pleno cruce de Pedregal el pasado jueves 7 de diciembre.
Este año 2006 será recordado por muchos ante la insensibilidad de algunos funcionarios públicos por los problemas sociales.
Con los maestros fue lo mismo. La ley de hielo se aplicó y al final, la educación de miles de alumnos se vio afectada en el periodo.
También pasó con los familiares y pacientes afectados por el envenenamiento masivo por medicamentos. En otros países, por decencia, los ministros y funcionarios encargados de la salud renuncian ante el impacto terrible de semejante escándalo, pero en Panamá los señores René Luciani y Camilo Alleyne no dejan sus puestos por cuestiones políticas.
Es repugnante por otro lado que directivos de la Caja de Seguro Social (CSS) insistan en que no hay fondos para pagarle 30 dólares a los viejitos que luchan por sus derechos.
Señores del Gobierno de turno: ¿Y porqué no le rebajan el salario a los nueve magistrados de la Corte Suprema de Justicia, a los del Tribunal Electoral, a los legisladores suplentes y a los demás funcionarios "botellas" que no hacen nada en sus puestos?
Me dio mucha lastima leer las declaraciones del vicepresidente Arosemena, el cual en tiempos de campaña política y cuando era dirigente de la Democracia Cristiana se ufanaba por dizque defender los derechos populares.
Allí esta el mejor ejemplo de que los políticos, cuando llegan al poder, se olvidan de las promesas politiqueras. ¿Y porqué Arosemena no se quita sus sueldos en el Estado para dárselos a los viejos?
Si Dios lo permite, algún día llegaremos a la edad dorada y de seguro estaremos luchando también por los mismos derechos de jubilación como el grupo actual de la Tercera Edad. Pero por favor, hay que ser realmente insensible al decir que le pagaremos a los ancianos que lleguen al final de esta década.
En el 2009, cuando vengan las elecciones, que no se extrañen los candidatos del PRD y de la Democracia Cristiano, hoy Partido Popular, que la gente les ignoren cuando busquen respaldo o votos.
