El base Chauncey Billups se ha propuesto ser la mayor "pesadilla" en la carrera profesional de Allen Iverson, que volvió con los Sixers de Filadelfia.
No pudo tener peor suerte Iverson con su ansiado retorno a los Sixers después que su ex equipo de los Nuggets de Denver, bajo la dirección de Billups, el mismo por el que lo cambiaron a los Pistons de Detroit, ganaron (83-93).
Billups brilló de manera especial en el ataque al conseguir 31 puntos, mientras que el alero Carmelo Anthony llegó a los 14 tantos para asegurar la cuarta victoria consecutiva de los Nuggets (16-5) que los dejó solos como segundos mejores de la Conferencia Oeste.
Pero al margen del resultado, el gran centro de atención fue el debut de Iverson, que recibió una gran ovación cuando fue presentado a los aficionados de los Sixers, en el Wachovia Center, y también despedido de la misma manera en el cuarto periodo.
Sin embargo, la presencia de Iverson, primer partido con los Sixers desde el 2006, no cambio su marcha perdedora (5-16), al ser derrotados pon décima vez consecutiva, y ya son junto a los Nets de Nueva Jersey (1-19) los dos peores equipos de la Conferencia Este.
Iverson, como titular, aportó 11 puntos al anotar 4 de 11 tiros de campo y dio seis asistencias en los 37 minutos que vio acción tras haber salido a la pista, besar el logotipo del equipo que hay pintado en el centro del Wachovia Center para recibir una gran ovación de los 20.664
