Las madres son seres maravillosos. Son aquellas mujeres que nos dan la vida. Nos cuidan con tesón, para lograr el triunfo y convertirnos en ciudadanos que luchen por una Patria mejor. Nos protegen de todos los males. Nos aconsejan sobre el futuro que debemos tomar. Siempre se preocupan por nosotros.
No puedo creer que en este mundo materialista, lleno de desgracias y crueldades, hayan mujeres que abandonen a sus hijos en los orfanatos. Que prevalezca la práctica del aborto, que se difundan los métodos que aniquilan la vida en los anticonceptivos. Dios nos dio la opción de la procreación y se escogió a la mujer para tal labor. Es un don divino, algo que tiene un significado más que la reproducción de la especie humana o un simple evento natural: Es un regalo; la bendición del Creador.
Cada año hay gente en nuestro país que irrespetan las madres. Tanto así que un grupo de políticos y empresarios todavía estudian la posibilidad de cambiar a un "DIA PUENTE" esta sagrada fecha, el ocho de diciembre, trasladándola a un simple lunes cualquiera. Todo con tal de ganar unos dólares más. Cuando se estableció la celebración del Día de las Madres en Panamá, se tomó en cuenta un evento especial en el calendario religioso: la Inmaculada Concepción de la Virgen Maria, madre de Dios y del Mesías cristiano, Jesucristo. A diferencia de la conmemoración de las madres en otros lugares del mundo (que generalmente celebran esta magna fecha a principios de mayo), en nuestro país, los primeros gobernantes de la joven república juntaron esa fiesta con una fecha religiosa, clave para la salvación de las almas.
No es fácil, como firmar un decreto de alteración de festividades, con un simple plumazo, el cambiar fechas por cuestiones vagas, con tal de generar negocios, Aquí el pasado gobierno del PRD intentó semejante experimento y fracasó. Incluso, hasta se celebró dos veces el Día de las Madres. Que desfachatez. ¿Será que los gestores de los "Días Puentes" no tienen algún respeto a las madres panameñas? ¿O acaso fueron clonados en un centro científico en Estados Unidos o Europa, sin que interviniera la naturaleza?
La mujer, como parte esencial de la familia, es crucial en la formación de los futuros ciudadanos en este país. No sólo el hombre trabaja. Desde hace siglos, las mujeres han llevado en cargas la educación de los hijos, el cuidado de los hogares, la protección de los chiquillos, etcétera. Ahora, el sexo femenino igualmente labora en grandes empresas, coopera con dinero y esfuerzo para que los niños tengan un sustento diario. Lo peor es que hay hogares sin padres. Son las madres solitarias las que en miles de hogares panameños ejercen el rol supremo, algo nada cuestionable, aunque esto puede tener consecuencias graves en el desarrollo de los adolescentes.
A pesar de todo, las madres panameñas han llegado a ser el pilar de nuestro país. Con todas las barreras y dificultades posibles logran que sus hijos obtengan el futuro deseado. Muchos profesionales admiten el enorme trabajo educativo, social y cultural que ellos adquieren en los primeros años de la vida, todo gracias al esfuerzo sobrehumano de aquellas mujeres que nos cuidaron desde pequeños. Respetemos esta fecha sagrada. ¡Porque las madres son sagradas! |