Las agencias humanitarias de Naciones Unidas definieron ayer el brote de cólera en Zimbabue como el peor de la historia del país surafricano.
"Hacemos frente a una epidemia sin precedentes", alertó la portavoz de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Veronique Taveau.
"El brote es mucho peor que el último grave de 1992. En Zimbabue hay cada año un brote de cólera, pero nunca habíamos visto uno de estas dimensiones", afirmó Fadela Chaib, portavoz de Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según los últimos datos, ha habido 575 muertos y 12.700 afectados, "pero hay que tener en cuenta que estamos hablando de los casos que conocemos, es decir, de los que se han informado, la cifra de enfermos debe ser mucho mayor, lo que nos da una idea de la amplitud del problema", aseguró Elisabeth Byrs, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
La respuesta humanitaria se ha dividido en dos: por un lado, la OMS intenta controlar la epidemia, y por el otro, UNICEF se encarga del grave problema de la distribución de agua potable.