Una nueva red de narcotráfico ha sido detectada en Panamá. Quizás la noticia no es nada nuevo en un país que sirve de tránsito para la cocaína colombiana, pero lo novedoso es la vinculación de funcionarios de diversas instituciones, sobre todo miembros de la Policía Nacional, en esa organización criminal.
La banda de funcionarios estaba al servicio de los carteles de Colombia y México. Hasta ahora sólo se conoce el nombre de algunos cabos, sargentos y tenientes, pero es probable que oficiales de mayor rango estén relacionados a este ilícito que investigan los Fiscales de Drogas.
El caso es alarmante por la penetración del narcotráfico a los estamentos de seguridad. La red internacional movía tal cantidad de efectivo al punto que a uno de los policías se le encontró en su casa casi 100 mil dólares.
También existe una realidad innegable, la plata fácil del narcotráfico está penetrando a la sociedad panameña y no solamente a los estamentos públicos. Banqueros, empresarios y otros profesionales caen ante la tentación de obtener miles de dólares sin mayor esfuerzo y sin tomar en cuenta que ingresan a un peligroso camino sin retorno.
Además de los servicios de “protección” a los narcotraficantes que le dispensaban a la droga y a dinero que sacaban e introducían a Panamá, también existe un negociado para dotar de documentos de identificación panameños a elementos extranjeros relacionados a actividades criminales.
Lo sucedido con este nuevo caso, obliga a las autoridades a reforzar sus controles internos para reducir la penetración de las organizaciones criminales, de lo contrario cada día veremos nuevos casos similares al descubierto ahora en una operación conjunta montada con las autoridades antidrogas de Panamá y los agentes de la DEA de Estados Unidos.