Desde el punto de vista de la psicología, en la musicoterapia se utilizan los sonidos para lograr resultados terapéuticos. En varias ocasiones lo hemos practicado, ya sea para concentrarnos antes de realizar un estudio, para relajarnos y recientemente, luego de terminar una jornada laboral, camino a casa escuchaba un disco compacto que me regaló mi hija, y entre las melodías que contenía estaba una de Ismael Miranda, titulada "Como el águila".
Decía este cantante puertorriqueño en la letra de la música la frase "soy como el águila, renuevo y vuelo alto". Estas ocho palabras me hicieron investigar sobre esta ave, y qué sorpresa para mí, unos días después me invitan a una reunión de damas, grupo femenino que se identifica como "Mujeres sobre alas de águila", en la que precisamente se abordó el tema de la renovación de esta ave. ¡Casualidad, no! Estoy convencida de que en la vida nada es casualidad, todo tiene un propósito.
En la reunión se comparte un relato relacionado con la renovación de esta especie, la cual es considerada la de mayor longevidad de su especie. Llega a vivir 70 años, pero para alcanzar esa edad, se encuentra que a los 40 años debe tomar una seria y difícil decisión que le permite vivir un proceso de renovación que dura 150 días; de lo contrario morirá.
Y se debe a que, a los 40 años, su pico se torna alargado hasta apuntarle en el pecho, ya no puede alimentarse; sus uñas apretadas y flexibles le impiden agarrar su presa; y se le hace difícil volar, pues sus alas están pesadas. Ante esta situación, toma la determinación de volar a la montaña para hacer un nido y lograr renovarse. La decisión es oportuna, después de cinco meses regresa renovada y con la posibilidad de vivir 30 años más.
Comparto con ustedes este tema que nos debe llevar a actuar de manera similar al águila. Tener presente que en la vida llegamos a un punto en que es necesario que logremos renovarnos para continuar un vuelo de victorias, pero para ello es importante alejarnos de costumbres y tradiciones que nos llevan en algunos casos a la rutina; además, esta decisión nos aleja del pasado que causa dolor. Únicamente libres del peso del pasado, podemos aprovechar el resultado valioso que una renovación siempre trae. Y como el águila, en la vida hay un período en que nos resguardamos para esperar nuestra renovación, una renovación que surge de las crisis, pero que nos brinda evolución personal.
Vivimos en mi Panamá, el país de las oportunidades, donde quienes esperan en Dios, tendrán nuevas fuerzas que los lleva a levantar sus alas como el águila, y les permitirá volar, correr y caminar hasta nunca desfallecer. Esta enseñanza reitera que hay en un ser cualidades que debemos imitar, se trata de la renovación, sabiduría y fidelidad.
