El Banco Mundial (BM) aprobó un préstamo por 170 millones de dólares y una garantía de crédito por 350 millones para la planta de celulosa que la empresa finlandesa Botnia planea construir en Uruguay.
El proyecto ha provocado un grave conflicto diplomático entre Uruguay y Argentina, que se opone a la planta, pero el Banco Mundial insistió en que su construcción tiene "significativas" ventajas económicas y no causará daños ambientales.
La planta de Botnia representa la mayor inversión extranjera en la historia de Uruguay y ayudará a crear alrededor de 2, 500 puestos de trabajo, según el Banco.
El organismo apuntó que la planta generará 2% del total del Producto Interior Bruto (PIB) uruguayo.