El cura párroco Víctor Samuel Arcia, sacerdote de la Basílica Menor de Santiago Apóstol en Natá, lamenta que se registren estas anomalías, manifestando que es una tristeza para el pueblo natariego que por falta de mantenimiento se esté perdiendo una joya de gran valor histórico para la comunidad.
Señala que desconoce el destino del dinero donado para el inicio de la restauración, cuestionando si se esperará a que se caiga la capilla para resolver, "la verdad que es una verdadera lástima que se den estas cosas en nuestra comunidad", acotó.