Por más de cinco horas, Panamá quedó divida en dos, pues las fuertes lluvias sobre el país desbordaron el río Grande en Penonomé, obstruyendo la vía Interamericana, y generando un tranque descomunal, desde y hacia la capital.
Miles de coclesanos y conductores fueron testigos de la impresionante imagen del río Grande atravesando la vía Interamericana. No fue sino hasta el mediodía que comenzó a bajar el nivel del agua y lentamente se normalizó el tráfico.
Según reportes del Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), unos 5 mil autos quedaron varados por horas, porque no se podía cruzar y, a pesar de la desesperación de los conductores, los estamentos de seguridad prefirieron esperar, pues no era seguro cruzar por la fuerte corriente del río más caudaloso de la provincia de Coclé.
Por horas, no hubo manera de ir al interior o de llegar a la capital, y esto desesperó a los conductores, como Juan Almadar, quien asegura que jamás había vivido algo tan desesperante.
Juan viajaba de Penonomé a Aguadulce en busca de su madre, porque le había prometido buscarla, sin embargo, el temor se apoderó de él y decidió regresar, tras cinco horas de tranque, a Penonomé, porque su temor era que, una vez más, el río se desbordara y pasara otras cinco horas varado, pero del otro lado.
Para los conductores de buses de diferentes rutas del interior, era desesperante, porque ya tenían horarios para llegar, pero lo que más les preocupaba era que sucediera cosa semejante con otros ríos en Coclé, o en el camino a Chiriquí.
Por su parte, Gilberto Méndez, director de la segunda región aeronaval, dijo que ellos, en conjunto con el Sinaproc, sobrevolaron el área para determinar la situación y, en efecto, hubo también afectaciones en el sector de Coclesito de Donoso en Colón, además del tranque descomunal que, pasadas unas cinco horas, pudo despejarse porque la creciente del río bajó.