La sed de justicia entre los panameños está influyendo en el pensar de las actuales autoridades. Cuando antes nunca se hablaba de citar a un ex presidente de la República para rendir declaración, hoy día ésta parece la opinión del secretario del Consejo Nacional de Transparencia y Lucha contra la Corrupción, Cristóbal Arboleda.
La ex presidenta Mireya Moscoso debe ser llamada a declarar ante el Ministerio Público por el uso que le dio a las partidas discrecionales. A ella se le deben aplicar las medidas jurisdiccionales que correspondan, según Arboleda.
No cabe la menor duda que en Panamá -forzado un poco por el entorno regional- los ciudadanos tienen deseos de ver a los 'monos gordos' detrás de los barrotes. Desde México a Argentina, a la justicia no le ha importado que investidura lleve quien se investigue. El caso más reciente lo están viviendo los hermanos costarricenses y ecuatorianos.
Panamá es un país cuyo indicador demuestra alto desagrado a los actos de corrupción cometido, pero, tal como lo señala Arboleda, el procurador José Antonio Sossa debe agilizar los expedientes sobre las denuncias, porque de nada servirá el esfuerzo hecho por el Gobierno si los casos quedan "impunes o dormidos en el sueño de los justos".
�Debe ir la ex presidenta a declarar? �Existen las garantías para hacerlo? las respuestas son muy claras: quien no la debe, no debe temerle al látigo de la justicia, por ello es recomendable aclarar todos y cada uno de los puntos que se le cuestionen a Moscoso.
Dependerá de ella asistir como ciudadana y responder al cuestionario que de seguro ya está preparado. Ojalá se actúe en derecho, alejado de cualquier ojo político para seguir viviendo en una democracia sana para todos los panameños, sin distingo de clase social.