Con fracturas en la mandíbula, tabique, pómulo y coágulos en la vista, resultó Rigoberto López Bello, de 33 años, quien fue agredido por un policía fronterizo.
Según versiones de los testigos, el afectado se encontraba jugando baraja en la casa de unos vecinos, ubicada en El Valle de Urracá, en San Miguelito. De repente, llegó el cabo Jairo Mena Mosquera, quien quería apostar con López, pero este último se negó.
En el lugar del hecho, se encontraba Yohana Caballero, esposa del afectado, quien manifestó que cuando López se negó a apostar, ella guardó su dinero en el bolsillo.
Según Caballero, cuando el cabo la vio guardando el dinero, arremetió contra ella con insultos y palabras soeces.
López salió en defensa de su cónyuge, pero el policía lo mandó al piso con un solo derechazo.
Una vez que López cayó al suelo, el cabo siguió dándole golpes y patadas, según manifestó la concubina del agredido.
La esposa de López también informó que mientras ella cargaba su hijo, de año y meses, el cabo le apuntó con un arma en la frente y le dijo: "Yo te mato a ti y a tu marido".
En ese instante, salió un vecino en defensa de la pareja, pero el mismo fue perseguido por el cabo y su hermano que estaba, presuntamente, armado con un machete.
Después de la persecución, el cabo y su hermano regresaron a la casa donde se dieron los hechos y luego de lanzar fuertes amenazas, se retiraron del lugar.
El herido fue llevado en primera instancia a un centro médico en San Isidro y después al Hospital Integrado San Miguel Arcángel, de donde fue trasladado al Hospital Santo Tomás, en el cual aún permanece hospitalizado.
Se pudo conocer que el policía fue detenido la misma noche del 2 de noviembre, pero el juez no le permitió rendir declaración porque se encontraba en estado de ebriedad.
La denuncia ya fue presentada a la oficina de Responsabilidad Policial de la Policía Nacional y el caso es investigado.