Estados Unidos acaba de sobrepasar el nivel de tolerancia de bajas en el campo de batalla.
Durante la segunda guerra en Irak, el Pentágono tuvo 115 muertos. Después del fin oficial del conflicto, ahora vemos que después hubo otras 116 bajas, debido a la guerrilla iraquí y a los atentados terroristas de grupos integristas como Anzar Al Islam y Al Qaeda.
¿Y que decir de los 20 mil muertos entre la población civil iraquí?
Si esto es victoria, entonces el sentido pírrico del triunfo es realmente cínico en las autoridades de Washington.
"De tal palo, tal astilla". Así reza la frase emblemática para definir la relación entre padre e hijo.
También es el sinónimo que relaciona el posible fracaso de la familia Bush, que a pesar de haber triunfado militarmente sobre sus enemigos, al final el pueblo estadounidense los rechaza en las urnas, por olvidarse de la crisis interna económica en la Unión Americana.
George Bush padre ganó en Panamá y en Irak, entre 1989 y 1991.
George Bush hijo invadió Afganistán y conquistó a Bagdad en 2001 y 2003.
Empero, estas sendas victorias resultaron a la larga el detonante del degradamiento de la imagen internacional de Estados Unidos, en especial hacia el mundo musulmán. |