El Papa Juan Pablo II, en el acto de clausura de las celebraciones de su vigésimo quinto aniversario, entregó los anillos oficiales a los nuevos cardenales que han pasado a integrar la élite de los que un día escogerán a su sucesor.
El Pontífice de 83 años, que padece la enfermedad de Parkinson y ya no puede caminar, permaneció sentado durante la misa en la Basílica de San Pedro, pero no fue él quien la condujo. Dicha misa fue dirigida por el cardenal Joseph Ratzinger y otros prelados.
Sin embargo, el Papa aún parece alerta después de semanas de celebraciones, durante las que presidió cinco audiencias ante multitudes, así como tres misas y un concierto.
El Papa entregó anillos de oro a los nuevos cardenales.
Dichos anillos representan su vínculo con Roma, así como sus lazos con el papado y la iglesia universal. |