¿Quiénes dicen amén...? Hermano, si estás pasando por un mal momento, te invito a que pases adelante y te inclines al Señor. Pídele ese auto que siempre soñaste, pídele esa casa que anhelas. Levanta tus manos al cielo y adóralo. Trae tu ofrenda de 20, 30 ó 40 dólares que Dios te la multiplicará por 100.
¿Han escuchado algo así en Panamá? Es común que muchas iglesias (no todas) estén hablándole a la mente de las personas, en vez del corazón. No es posible que esto se esté dando, pero tal como está escrito, debe suceder. Muchos serán engañados.
Hoy queremos hablarte a tí, estimado pastor o líder de la iglesia. Revisemos las escrituras correctamente para reorientar nuestras prédicas. Giremos el timón porque nos estamos saliendo de la carretera y por ahí podremos caer en el abismo y morir sin salvación.
Jesús lo dijo claro. Id por todo el mundo y predicar mi evangelio. Las buenas nuevas que anunció es la salvación. No dijo que tendremos riquezas materiales para todos los que le sigan.
Estimado hermano, si usted pregona lo material antes que el amor de Dios está cayendo en el plan de Satanás y no en el plan de Dios. Recuerde que Jesús dijo: el que tiene el Hijo tiene la vida; nadie viene al Padre si no es por mí y también dijo algo muy importante: Buscad el reino de Dios y todo lo demás vendrá por añadidura. Recuerde que muchos todavía tienen tiempo de salvarse. Es mejor hablar de la vida eterna o la nueva vida que de un carro nuevo.
El hombre puede perder su cuerpo, pero todavía tiene tiempo de salvar su alma si le abre su corazón humillado al señor.