Hoy se cumplen 40 años de aquella desmoralizadora tarde, cuando la directora de una escuela pública dibujó un avestruz con cuatro patas en pleno programa televisivo de Don Martínez Blanco. También hoy me llega la desconsoladora noticia que cincuenta profesores no dieron la talla en el primer y elemental concurso que realiza el Ministerio de Educación, para elegir antes que termine el 2009 a los directores de 13 regiones educativas del país. Pésima ortografía y defectuosa comunicación oral entre otras consideraciones fueron suficientes para echarlos para atrás.
Muchos profesores son excepcionales, oír hablar por ejemplo a profesoras como Mercedes Bolaños, con su riqueza léxica, su dicción cuidadosa y perfecta sintaxis, ha sido siempre un placer para la inteligencia, oír a determinados diputados, ministros educadores y comentaristas de televisión, en cambio, es asistir a una catástrofe de la gramática.
Esta lamentable situación cultural, le importa a muy pocos y la misma es aprovechada por políticos de lado y lado, que ya no atacan al pueblo sino que les es más fácil atracarlo merced a la ignorancia que cunde. Yo esperaba que el gobierno de la "patria loca", (Quienes han hecho más, en 100 días que lo que hizo la patria nueva en 5 años), iba a revisar los tugurios de diplomas que han invadido el mercado laboral. La cantidad de imberbes con títulos inmersos en una inconmensurable ignorancia, es tal, que muchas esferas como la educativa, están afectadas de las especializaciones en demasía. Para muestra esta perla!, que cuidado y los educadores titulados que fracasaron el examencito del Meduca, quién quita posean numerosos diplomas rimbombantes (Magíster y Phds hasta con énfasis en mear y cagar.), lo que no aclaran estos certificados es la cortísima duración con que son obtenidos, tres meses y hasta semanitas para graduarse. Ante estas bellezas solo me queda exclamar: ¡Ay! me duele por la educación y la triste derrota del castellano.