La República Checa goleó ayer por 3-0 a Alemania, en Múnich, apagando la euforia que reinaba en el entorno del equipo nacional germano, que hasta ahora se había mostrado intratable en la eliminatoria y se había autoproclamado favorito para ganar la Eurocopa.
El equipo de Joachim L w -ya clasificado para la Eurocopa- no pudo compensar las bajas de Michael Ballack, Miroslav Klose, Bernd Schneider y Philipp Lahm y sucumbió ante un equipo checo que mostró buen trato de balón y eficacia y que, a diferencia de otros compromisos, mostró variedad de recursos y no se limitó a buscar al gigante Jan Koller.
La República Checa salió desde el comienzo por todo, mientras que Alemania lució falta de concentración. Ya en el minuto 2, los checos se adelantaron con un gol de Libor Sionko, y en el 23, dos errores sucesivos -de Torsten Frings y del madridista Christoph Metzelder- llevaron al segundo gol marcado por Matajovski. En un contragolpe, en el minuto 63, llegó el tercero por intermedio del jugador de Osasuna, Jaroslav Plasil.