Este enfermo mental conocido solo con el nombre de Donaldo, murió desnudo y abandonado en una acera frente al Hospital Manuel Amador Guerrero, en la ciudad de Colón.
Donaldo, según algunos doctores, enfermeras y pacientes, dormía en cartones en ese rincón, contiguo a la sala de Ortopedia del Hospital.
El hombre caminaba anteriormente por las calles de Colón y pedía dinero para comer, o sino sacaba desperdicios de los tinacos para alimentarse. Se desconoce si el pobre hombre tenía familiares. |