Estos eran los antimotines de la década del setenta. Las máscaras antigases eran muy distintas a las que hoy utilizan las unidades de la Policía Nacional e incluso a las utilizadas por las Fuerzas de Defensa. No habían los escudos protectores que hoy cubren a los uniformados ante las piedras que les lanzan los manifestantes en respuesta a la represión con lacrimógenas y perdigones.