Siete palestinos murieron y más de 75 resultaron heridos en una nueva ola de enfrentamientos entre seguidores de HAMAS y Al-Fatah en Gaza y Cisjordania, reflejo de la tensión entre el Gobierno de Ismail Haniyeh y la Presidencia de Mahmud Abbas.
Gran parte de los manifestantes, vinculados al movimiento Al-Fatah, que preside Abbas, exigen al Ejecutivo palestino que pague o dimita de sus funciones, pues esta situación acucia al funcionariado palestino desde que el grupo islámico accedió al Gobierno hace seis meses.