El entrenador del Olympique de Marsella, Didier Deschamps, dijo ayer tras perder 3-0 ante el Real Madrid, que aunque no le gusta hablar del árbitro el penalti y la posterior expulsión de Diawara fueron decisiones "muy severas".
"No me gusta hablar del árbitro, pero creo que tomó una decisión muy severa. Primero por dar el penalti y después en la expulsión de mi defensa. Once contra once aquí ya es difícil, con un hombre menos es otro partido", señaló.