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Peligro inminente casas a orilla del río
En casi todas las regiones del país se dan casos y hay que señalar como ejemplo el peligro que el pasado fin de semana vivió más de 300 familias que habitan a orillas de río Chiriquí Viejo en la comunidad de Divalá y Puerto Armuelles, quienes por falta de una infraestructura física que le permita desarrollar una mejor calidad de vida tienen que establecerse en estos lugares.
Bleixen Caballero
EPASA / Chiriquí
El problema de la falta de vivienda aptas para la supervivencia humana ha sido por siempre uno de los factores que ha provocado el asentamiento y establecimientos de casas improvisadas inadecuadas para un hogar. Al respecto el Ministro de Vivienda, Miguel Cárdenas manifestó que éste es un "problema de vieja data", al que por tantos años se le ha querido brindar una solución acorde a las necesidades de los tiempos. En casi todas las regiones del país se dan casos y hay que señalar como ejemplo el peligro que el pasado fin de semana vivió más de 300 familias que habitan a orillas de río Chiriquí Viejo en la comunidad de Divalá y Puerto Armuelles, quienes por falta de una infraestructura física que le permita desarrollar una mejor calidad de vida tienen que establecerse en estos lugares. En cuanto a este aspecto moradores y autoridades del área manifestaron que este es un problema de siempre en donde cada año surgen nuevas causas ya que los personas viven a orillas del río y dentro de las plantaciones de banano en donde además de perjudicar sus vidas con las inclemencias del tiempo sufren otros problemas a causa de los químicos que se utilizan en la producción, los cuales provocan enfermedades latentes en sus cuerpos. Las soluciones brindadas a través de los años por diferentes autoridades no han sido factibles ya que el problema se presenta año tras año, en donde desgraciadamente todas las fincas son inundadas por ambos lados del río, lo que significa que se requiere de más conciencia y atención a las respuestas que se le dan. Vocero de la comunidad de Divalá manifestó que esta problemática resulta bastante alarmante ya que durante la época lluviosa específicamente el acceso a estas áreas se torna difícil debido a la distancia y peligro que se tiene al vivir en estos lugares aledaños al río, el cual en años pasados dio como resultado la muerte de un señor llamado Chicho Rojas, quien al tratar de rescatar a los habitantes de ese lugar perdió la vida, por lo enfatizo que no situaciones de esta naturaleza no se deben seguir dando. Por ello se necesita que el gobierno central emplee un plan que pueda reubicar a todas aquellas personas para evitar más desastres y así se pueda tener más seguridad con esas personas que a diario están en peligro inminente. Vocero de los damnificados manifestó que la solución debe darse a través de un plan en conjunto con los trabajores y el gobierno, para estudiar la posibilidad de cómo sacar los trabajores del área de las fincas, ya que además de los problemas de inundaciones los mismos están expuestos a miles de otros problemas que a raíz de la crecida del rió. Experimentan por ejemplo la supervivencia a la falta de agua y luz, que colocan a las personas en un estado terriblemente desastroso para subsistir, por ello la necesidad urgente de un traslado, hacia las áreas centrales de la comunidad, lejos de todo peligro. En cuanto a las soluciones que se pueden dar autoridades del sitio manifestaron la posibilidad de crear un plan de vivienda con el ministerio de vivienda y de esta manera albergar a las familias que viven en esta situación. Por lo que señalaron la situación acaecida el pasado fin de semana como el momento propicio para que se determinen las respuestas que se darán para la implementación de un gran proyecto social tan necesario para el lugar. Por su parte funcionarios del gobierno central enfatizaron que las ayudas para el sector se estudiaran para determinar si existe la posibilidad de ayudar a las 1,600 familias establecidas en estos sitios, por lo que se acordó que si existe el terreno municipal el ministerio adquiere el compromiso de construir viviendas dignas para evitar estas situaciones que ponen en peligro más de 1000 vidas, establecidas en estas regiones. La comunidad espera que estas promesas no solo hayan surgido a raíz de este problema que hoy dejaron a 1000 damnificados que perdieron sus enceres, y tuvieron que vivir situaciones de peligro al ver subir las aguas que cubrieron por completo sus casas; si no que se conviertan en una realidad porque no es posible seguir viviendo en una situación de peligro en donde no se sabe cuando ocurrirán mas desastres naturales.
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