Tras de 180 días de trabajo una Comisión de Estado por la Justicia debe presentar hoy al Ejecutivo sus recomendaciones, luego de escuchar los criterios de 27 organizaciones y particulares.
Se recomienda una serie de acciones, entre ellas las reformas a los Códigos Penal, Civil y Administrativo.
En cuanto a la selección de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y Procuradores, se plantea un mecanismo de preselección, donde participarán representantes de los decanos de las Facultades de Derecho de las distintas universidades, del Colegio Nacional de Abogados, de Alianza Ciudadana Pro Justicia, del Órgano Judicial o del Ministerio Público y el Comité Ecuménico, que será observador y dirimente en el proceso de preselección.
Este parece ser uno de los principales avances, frente al cuestionamiento constante que se le hace a la cúpula del Organo Judicial. Habrá una especie de concurso para que participen los interesados y luego una evaluación para seleccionar hasta 15 candidatos que serían enviados al Ejecutivo para su selección.
Además la Comisión propone desarrollar con mayor claridad la facultad de la Asamblea Nacional para juzgar a los magistrados de la Corte.
Ojalá que con el nuevo reglamento de preselección impere el profesionalismo, créditos, trayectoria y otros requisitos que hagan que los candidatos que se propongan al Ejecutivo, sean los mejores aspirantes a ascender al cargo de magistrado de la Corte. Lo importante es que no impere el amiguismo, los intereses de grupo y de otra índole que puedan dañar una buena intención y por ende una designación.