Talento y mucha creatividad son elementos indispensables que se requieren para la elaboración de las máscaras de diablo, que en el caso de las del distrito de La Chorrera se distinguen por ser más chicas e inspiradas en animales comunes del país.
Este año por primera vez y en el marco del 154 aniversario del distrito de La Chorrera, la Junta de Festejos Patrios, atinadamente creó el Concurso de Máscaras, que contó con 5 participantes.
En esta ocasión, el ganador indiscutible fue el diseñador Marcos Cruz, quien se llevó el primero y segundo lugar; y el ganador del tercer lugar fue el artesano Martín Tapia.
Marcos Cruz señala que aprendió a confeccionar máscaras en la Escuela de Bellas Artes hace muchos años, motivado por conocer como se hacían. Explica que en esta confección el barro es la materia prima de donde se saca el cascarón con el que se elabora el empapelado y el engrudo de la máscara".
Para la elaboración de estas máscaras, se requiere de materiales como tierra de arrieros o arcilla, la cual luego de amasarla se le da la forma que uno desee, "ya sea de animales o figuras tenebrosas". Una vez que se tiene definida la figura que se va a emplear se procede a empapelarla con papel de tienda o de periódico y para el acabado se usa papel Manila.
El modelo que el artista utiliza es cuestión de inspiración, según dice Marcos Cruz, quien señala que en el caso de La Chorrera, "yo me guío más por hacer animales tenebrosos, que ahora son más elaborados como serpientes y animales mitológicos".
El costo de las máscaras, que actualmente son muy cotizadas, oscila entre B
50.00 a B/60.00, y las más sofisticadas cuestan hasta B/150.00.
