El viejo parque de la ciudad de Santiago, Juan Demóstenes Arosemena, que por más de 80 años, sirvió de sana recreación y lugar de preferencia para niños, jóvenes y adultos lo están restaurando para embellecer a la cuidad de Santiago y darle una mayor importancia para satisfacer las visitas de extranjeros y nacionales.
Por el momento, han surgido algunas discrepancias, en la comunidad santiagueña, por la tala de los viejos árboles de gran tamaño que fueron cortados desde las raíces, pero la empresa constructora o restauradora, que tiene la obra en el parque, sostiene que la tala era necesaria, por lo peligroso que se tornaban, puesto que estaban a punto de caerse.
TALA NECESARIA
Se conoció que se elevaron las debidas consultas, en este caso, a la Autoridad Nacional de Ambiente, quien acordó que era preferible cortarlos y sembrar especies nativas que no hagan daños de gran magnitud como ocurrió con los pinos y fiscus que fueron plantados hace más de 80 años. La ANAM dio a conocer que era preferible eliminarlos.
Walter Cáceres, responsable de los trabajos que ascienden a los B
114.000 para hacer un parque nuevo, señaló que se contempló el reemplazo de todos los árboles cortados con especies nativas y que no afecten las construcción, puesto que los que estaban dañaron las losas, incluyendo a la costosa estatua del ex presidente de la República en 1936-1939, Juan Demóstenes Arosemena que se encuentra en este lugar.
En la primera semana se cortaron los enormes árboles, seguido de las fundaciones y se levantó la antigua losa que data de más de 50 años, la cual estaba deteriorada en la mayoría de los tramos, lo que a criterio de la empresa constructora, se debió a que las raíces de los árboles rompieron la mayoría de partes, por lo que era imposible dejarlas.
REMOCION
Estos trabajos de remoción en el parque municipal de Santiago, Juan Demóstenes Arosemena, ha causado incomodidad en algunas personas, sobre todo, en los ambientalistas que ahora señalan sus desacuerdos por la tala de los árboles antiguos de especies que no son nativas de estas tierras, pero según las autoridades municipales y los ingenieros de la obra, el problema estaba en que ya eran peligrosos y algunos ya habían empezado a caerse y a secarse, lo que indica que, evidentemente, eran un riesgo para quienes constantemente visitaban el lugar.
La Autoridad de Turismo Regional había considerado este parque como uno de los atractivos turísticos de la ciudad de Santiago, sin embargo, de acuerdo a los técnicos que están a cargo de los trabajos el parque tenía forzosamente que cerrarse por el peligro de los árboles que se estaban cayendo con los vientos y las lluvias.
El alcalde de Santiago, Gonzalo Adames, comentó que, pese a que la pasada administración dejó una maqueta y planos que no se ajustan como se quiere, los trabajos se hacen con algunos ajustes en coordinación con el Departamento de Ingeniería Municipal para que este parque quede como quieren los santiagueños