Las menores de edad que tienen vida sexual activa no quieren hacerse las pruebas de papanicolau para evitar que sus padres se enteren de su condición personal.
Los médicos especialistas están preocupados porque es la etapa donde estas personas niegan u ocultan su vida sexual activa y la paciente se encuentra en una etapa inmunológicamente más susceptible para adquirir virus o enfermedades de forma más fácil.
Fuentes de salud estiman que el 40 por ciento de las adolescente en algunos sectores de Chiriquí mantienen una vida sexual activa antes de los 18 años de edad y muchas de ellas se encuentran en los centros educativos.
Gladis Novoa, especialista en ginecología, explicó que hay muchas adolescentes en esta condición y están sujetas a mayor riesgo porque sus compañeros sexuales son más promiscuos en esta edad.
"Nos preocupa mucho porque en esta etapa es donde estas jóvenes son más contagiadas por el papiloma virus que es uno de los causantes más frecuentes del cáncer cérvico uterino, porque está a la orden del día", dijo.
Por esta razón extendieron la campaña en contra del cáncer cérvico uterino hasta el próximo 30 de septiembre, tomando en consideración que hay una gran cantidad de mujeres de los distritos de Alanje, Boquete y el oriente Chiricano que no han acudido a los centros médicos.
