Los casos más sonados de corrupción durante las últimas dos administraciones gubernamentales de los ex presidentes Mireya Moscoso y Martín Torrijos suman un perjuicio económico contra el Estado de $17.6 millones, según un informe revelado ayer por el contralor, Carlos Vallarino, ante el pleno de la Asamblea Nacional.
Destacó que en los últimos 24 meses el perjuicio económico asciende a $7 millones.
Señaló que entre el año 2000 y agosto del 2009, la Contraloría ha remitido a la Procuraduría de la Nación cerca de 523 informes de auditoría con irregularidades de toda clase en casi todas las instituciones del Estado.
Vallarino inventarió algunos casos de supuesta corrupción que están siendo investigados por la Contraloría y detalló que las irregularidades en el Programa Red de Oportunidades ascienden a $210, 675.
El funcionario manifestó que a medida que la Contraloría detectaba irregularidades en los procedimientos de pago de la Red de Oportunidades, se notificaba la falta a los funcionarios responsables del programa para que aplicaran los correctivos. Vallarino expresó que durante ese proceso envió unas 12 cartas sin respuestas.
Detalló que de los $17.6 millones incluidos como perjuicio económico contra el Estado, la mayor cuantía se le atribuye a proyectos del FIS bajo la Presidencia de la República por $5.4 millones, Consulados por $1.8 millones, BDA por $4 millones, MOP por 590 mil; y en otras entidades, la cuantía suma $2 millones.
En el caso del manejo del FECE, Vallarino expresó que al 31 de agosto el manejo irregular del programa suma $3.7 millones. "Allí las cosas eran graves, había alteración de firmas, retención de fondos y se eliminó el control previo de la noche a la mañana", dijo.
Por el lado de la remoción de la fibra de vidrio, el funcionario explicó a los diputados que la lesión patrimonial se calcula en $1.4 millones.
En este renglón, las principales irregularidades giraban en torno al incumplimiento de contratos, trabajos no realizados por los contratistas, contrataciones directas con estimados de $24 el metro cuadrado por parte del MEDUCA, como precio ofertado por todos los contratistas para la remoción de la fibra de vidrio, entre otras faltas.