Delitos contra el pudor y la libertad sexual se mantienen en segundo lugar como los casos más frecuentes en la provincia de Bocas del Toro, según estadísticas de la Policía Técnica Judicial (PTJ), superados por los hurtos.
En el 2003 se registraron 55 casos de violaciones; de éstos, el 80% contra niñas de entre seis y 16 años, y ese mismo porcentaje con respecto a niñas de origen indígena.
Abdiel Caballero, inspector jefe de la PTJ en Bocas del Toro, dijo que en la mayoría de los casos el infractor es un familiar o conocido de la víctima.
"Casualmente, hace unos minutos llegó una niña de 13 años supuestamente violada por su propio padre", aseguró el funcionario.
"Han transcurrido tres días de este mes (septiembre) y ya son dos casos los recibidos", apuntó.
Mencionó que entre los violadores- además de padres hay hermanos, primos y amigos- en algunos casos en una sola familia han resultado hasta tres afectadas por un solo sujeto.
El hacinamiento es un factor importante, también lo es la dependencia económica, pues muchas víctimas son amenazadas con ser abandonadas a su suerte.
Han sido víctimas y han resultado niñas embarazadas.
En lo que va del año, ya son 43 las víctimas, de continuar las cifras indudablemente el total del 2003 será superado, insistió el funcionario.