Después de la histórica condena a 150 años de prisión al ex militar Felipe Cusanero, los familiares de seis indígenas desaparecidos entre 1982 y 1984 exigieron ayer la aparición de sus cuerpos y una ley que permita localizar a 45.000 desaparecidos durante la guerra (1960-1996) en Guatemala.
En una rueda de prensa, activistas de derechos humanos y el padre de uno de los desaparecidos expresaron su satisfacción por la sentencia emitida por el Tribunal de Chimaltenango.