Querido(a) Hermano(a): La Vicaría de Pastoral Arquidiocesana, en este cuarto año de misión, cuyo tema es "El Compromiso Socio-Político de las Comunidades Eclesiales", se ha propuesto mediante diez interesantes temas, educar a los cristianos para que tengamos una participación política basada en los valores evangélicos.
Tema VII: POR UNA DEMOCRACIA AMPLIA Y PARTICIPATIVA "Democracia" quiere decir que somos los ciudadanos y las ciudadanas quienes tenemos el poder de decidir y que los gobernantes deben estar al servicio del bien común y no al revés, como ocurre habitualmente.
Nuestra participación se expresa principalmente a través del derecho al voto, por el cual el pueblo elige a sus gobernantes. Dentro del sistema democrático los partidos son el medio propio para participar en la política. Los partidos pueden tener muchos miembros. Algunos son militantes activos. También hay quienes tienen una vocación política más precisa y aspiran postularse a los puestos de elección popular.
Para que funcione la democracia, es necesario un marco constitucional y legal. Es importante la libertad de pensamiento y el derecho a la libre expresión de las ideas. De aquí, la exigencia de la libertad de prensa y la necesidad de asegurar a todos el derecho de acceder a los medios de comunicación en igualdad de condiciones.
La democracia debe ser también un estilo de vida. Algunas de las virtudes ciudadanas y disposiciones habituales que tenemos que desarrollar y que hacen posible convivir en democracia son: el respeto por el otro, la tolerancia hacia ideas y opiniones diferentes a las mías, la capacidad de diálogo, la participación responsable en los quehaceres de la comunidad, la reflexión crítica sobre los problemas que se presentan, la no-violencia activa, el sentido del bien común y la honestidad.
Sin estas actitudes ciudadanas es muy difícil que un sistema democrático funcione. También a través de las diferentes iglesias, de las escuelas y de los medios de comunicación social se debe promover una cultura de paz y de preocupación por el bien común.
Fuente: Vicaría de Pastoral Arquidiocesana |