La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), con sede en Costa Rica, escuchó ayer la declaración del ecuatoriano Jesús Vélez Loor, detenido y encarcelado en Panamá en el 2002, sobre las supuestas torturas y violaciones a los derechos humanos que sufrió en ese país.
La supuesta víctima contó a los jueces cómo, en su calidad de inmigrante ilegal, fue arrestado de manera violenta por la policía el 11 de noviembre de 2002 en la provincia de Darién, y luego estuvo preso por 10 meses, hasta que fue deportado en septiembre de 2003.
De acuerdo con Vélez, la noche de su arresto, oficiales armados con rifles AK47 lo hicieron caminar descalzo desde el punto de su detención hasta un cuartel, donde lo colgaron por más de ocho horas de un brazo y lo golpearon.
De acuerdo con los representantes del Estado panameño, se debió a que antes de noviembre de 2002, Vélez había sido detenido y deportado en tres ocasiones a Ecuador.