La Ley de Responsabilidad Fiscal en vez de controlar el déficit lo ha disparado, denunció el banquero Alberto Vallarino, destacando que de un balance deficitario promedio de B/.24 millones anuales desde 1990 hasta el 2001, desde la vigencia de la legislación en referencia, el promedio de ese renglón fue de B/.273 millones por año.
Para Alberto Vallarino los hechos demuestran que la ley destinada a imponer disciplina fiscal no ha cumplido sus propósitos y el gobierno a través de una contabilidad creativa ha logrado burlar el espíritu de la misma y ha terminado haciendo lo que la ley estaba destinada a evitar.
Además, dijo que este gobierno recibió una deuda pública contractual en 1999 de B/.7,763.6 millones y ahora es de B/.9,010.5 millones, cifra que no incluye los sobregiros en el Banco Nacional que se estiman en B/.890 millones y la deuda flotante con proveedores, que asciende a B/.458 millones. Según Vallarino, Panamá corre un riesgo muy grande de verse forzada a "liquidar" activos nacionales para hacerle frente a requerimientos de los acreedores.